Hablamos con Andrea tras contactar con varias fotógrafas. Nos decidimos
porque entendió perfectamente lo que queríamos, era muy cercana y flexible.
Nosotros queríamos algo muy sencillo, pero no teníamos ni idea del talento que
nos íbamos a encontrar. Andrea estuvo presente en cada pequeño momento,
en cada detalle durante la ceremonia. En la sesión con nosotros solos consiguió
retratarnos como nadie y, finalmente, en el aperitivo, capturó un montón de
instantes entre nuestras familias y amigos que podré guardar para siempre.
Estamos tremendamente agradecidos por haber contado con Andrea en
nuestro día.